La Ermita del Ecce Homo, o Ermita del Santo Cristo de la Caña como la conocen los vecinos, es un lugar de interés cultural para conocer la tradición de las fiestas cristianas barrocas en Frigiliana. La procesión de imágenes representativas de la fe cristiana es una tradición presente en Frigiliana desde el siglo XVI, aunque las imágenes que se procesionan hoy día son posteriores, neobarrocas del siglo XX, y no nos sirven para documentar el momento de origen, sino que son sólo testimonios de la permanencia de la tradición en la población. El miércoles santo se procesiona desde esta ermita hasta la Iglesia de San Antonio la talla del Ecce Homo, una pieza en madera policromada de estilo neobarroco realizada en la segunda mitad del siglo XX.
La ermita es un pequeño edificio cuya primera construcción se viene datando en el siglo XVIII, bastante remodelada, de una sola nave, con un pequeño altar en la cabecera, en la que se ubica la imagen citada dentro de una hornacina rodeada de un pequeño y simple retablo con decoración arquitectónica de pilastras en los extremos. Delante tiene un pequeño espacio a modo de pórtico cubierto que marca el acceso a la ermita a través de un arco de medio punto, y que tiene, como el resto del edifico, una cubierta de madera a dos aguas.